Aderezos que engordan y vacas flacas que sufren de omnipotencia. La Mayonesa Griega no es un condimento que acompañe cualquier momento. Nació para robarle tiempo al tiempo de otros, y hoy es sólo un espacio para jugar a qué se algo.

martes, diciembre 13, 2005

Entre el cielo barroco y el infierno santiagueño


Llego con sol a mi departamento del trabajo. Todavía no me acostumbro a esto de no vivir sobre la faz de la tierra. Me acuesto en la cama desecha y no puedo hacer nada más por aproximádamente media hora.

Miro el techo, me voy relajando de a poco. Cierro los ojos, dejo un poco que Pericles me bese la mano y lo echo no sin esfuerzo, hasta que se sube a mi cama y la discusión concluye nuevamente conmigo cediendo. Entonces comienza la función: los vecinos del edificio de al lado que se juntan todos los lunes a ensallar con su coro lírico, me van transportando hacia las nubes. Sin ironía, es fantástico. La acústica me favorece ya que su ventana da al patio interno de mi departamento, al cual da la ventana de mi cuarto.

Aprovecho, cierro los ojos y me dejo encantar... hasta que el chamamé furioso de la peña folclórica del salón de al lado me derrumba y me deja sin aliento.

Cómo explicar mi situación? De un lado la magia austríaca del bello canto, del otro el grito hondo del campo polvoriento. Al mismo tiempo, en fusión imposible y mi cama en el medio. Perdida.

Qué suerte que Pericles no entiende nada de nada y me sigue lamiendo la mano. En cuanto mi vecina de enfrente empiece con la tele, me voy a descansar al bar de la vuelta.

2 comentarios:

G. dijo...

Deberías hablar con tus vecinos del coro lírico, y pedirles te inviten a su ensayo.
Desde allí vas a disfrutar más del "concierto privado" y espero, no se escuche el chamamé.

De otro modo, aprendé a bailar chamamé y andate más descansada a sacarle polvo al piso.

paula p dijo...

srita........ ud es de nacionalidad balcànica, mh?

atentìsimamente

Acerca de mí

Análista Free-lance de Investigación Social y de Mercado